sábado, 25 de abril de 2009

Cautiva en Arabia



Cristina Morató
Plaza y Janés, 2009
415 pp.






No descubro nada al afirmar que Cristina Morató tiene una escritura suelta, que fluye con agilidad y que con ella hilvana historias que fijan la atención del lector y lo sumergen en el discurrir de una aventura de la que no sale hasta que termina el libro.

Cristina Morató se encuentra a gusto en el entorno de la literatura de viajes y sigue en este nuevo libro dentro de la atmósfera de las mujeres viajeras que con tanto acierto desarrolló con Las reinas de África y con Las damas de Oriente.

No es, sin embargo, una tercera entrega de la serie lo que ahora nos trae. Es el resultado de un descubrimiento cuya historia parece tan novelesca y resulta tan inesperada que casi casi no le queda a Cristina más remedio que rendirse a ella y convertirla en libro. 

Un personaje más próximo a nosotros de lo que suelen ser los viajeros anglosajones que forman el grueso de los héroes en la historia de los viajes, una mujer nacida en una familia de postín del país vasco francés, enérgica y aventurera, educada en parte en España, complicada y decidida que descubre la llamada de Egipto y del Oriente Próximo y que en la primera mitad de siglo XX viaja, se instala, organiza su vida allí y vive aventuras y episodios de lo más diverso envueltos, cuando se miran con la distancia del tiempo, en un sugerente halo de misterio y confusión.

El personaje de Marga d’Andurain sostiene por sí mismo la historia que cuenta Cristina Morató tanto por sus rasgos de personalidad fuertes y decididos como por el entorno y las circunstancias entre las que se desenvuelve su vida. Las peripecias personales, la vida en el País Vasco, los negocios, los viajes a América del Sur, a Egipto, a Siria… un montón de experiencias disponen una aventura vital que cautiva y sorprende. La insólita trayectoria de Marga d’Andurain seduce por ese atrevimiento que parece llevar la realidad al terreno de lo novelesco.

Pero sin duda, a la viveza de la historia contribuye Cristina Morató llenando de vida su relato. Ha sido larga la labor de búsqueda que Cristina ha debido de hacer para recuperar un personaje olvidado. Periódicos, libros y poquísimos testigos de la época le reportaron frutos valiosos en una labor de investigación exhaustiva. Pero no fueron tantos como para que la historia se escribiera sola. Cristina Morató ha suplido la falta de información directa con su enorme capacidad de recrear situaciones y con su dilatado conocimiento del mundo por el que Marga d’Andurain se movió. Relatos de otros viajeros, imágenes vividas de lugares y de ambientes exóticos, formas de viajar de otros tiempos, otros modos de afrontar la aventura resuenan en el libro de Cristina Morató para dar vida y realidad a un relato que se hace más interesante aún.

La presencia de Cristina Morató es más importante en el libro de lo que aparenta. El regreso a la luz de Marga d’Andurain debe a Cristina un meticuloso trabajo de reconstrucción alrededor de unos hechos y de recreación de las escenas que dan color y sentido a la aventura de la protagonista. No podía Cristina hacer otra cosa. Si su personaje hubiera sido más accesible hubiera formado parte ya de la aventura literaria de algún otro autor. Y si hemos de creer que Marga ejerció de espía a favor de los ingleses en una región tan complicada, tampoco ha de sorprendernos que acturara con más discreción de lo que aparentaba y que dejara unas huellas confusas de su paso a lo largo de una buena parte de su vida.

He empezado diciendo que Cristina Morató se desenvuelve bien en ese mundo sin límites que es el de los viajes. Que sabe, además, sacar partido a la historia de lugares y países para contextualizar lo que cuenta y poner al lector en antecedentes de lo que rodea a los acontecimientos que narra. Su experiencia y su conocimiento le han permitido culminar la aventura de Cautiva en Arabia con éxito. Seguro que al recorrer esta vida llena de sucesos singulares, de personajes llamativos y también de intriga, el lector agradece a la autora su acierto, porque habrá disfrutado con su libro de esos momentos de satisfacción que no se olvidan.

1 comentario:

Verónica Rodríguez dijo...

Escuche una entrevista de la autora en RNE3 y me apunté este libro para leerlo en breve.
Me parece una autora apasionante y apasionada.
Un saludo